Liber V, 641-653

Haec memorans prima infensum ui corripit ignem

sublataque procul dextra conixa coruscat

et iacit. Arrectae mentes stupefactaque corda

Iliadum. Hic una e multis, quae maxima natu,

Pyrgo, tot Priami natorum regia nutrix: 645

'Non Beroe uobis, non haec Rhoeteia, matres,

est Dorycli coniunx; diuini signa decoris

ardentisque notate oculos, qui spiritus illi,

qui uultus uocisque sonus uel gressus eunti.

Ipsa egomet dudum Beroen digressa reliqui 650

aegram, indignantem tali quod sola careret

munere nec meritos Anchisae inferret honores.'

Haec effata.


Mientras recuerda estas cosas, agarra la primera con fuerza una llama amenazante

y la hace brillar blandiéndola con la diestra levantada

y la lanza lejos. Se animaron sus mentes y quedaron atónitos los corazones
de las troyanas
. Entonces una de la multitud, que era la mayor por nacimiento,

Pirgo, real nodriza de tantos hijos de Príamo: 645

«No está Béroe ante vosotras, no es ésta la retea, madres,

esposa de Doriclo; las señales de una divina belleza

notad y los ojos ardientes, qué aliento tiene,

qué rostro y qué sonido de voz y qué pasos al andar.

Yo misma hace un tiempo, cuando me vine, dejé a Béroe 650

enferma, enojada por ser la única en faltar

a una ofrenda tal y no llevar a Anquises los merecidos honores.»

Estas cosas dijo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario