Liber II, 386-401

Atque hic successu exsultans animisque Coroebus
'O socii, qua prima' inquit 'Fortuna salutis
monstrat iter, quaque ostendit se dextra, sequamur:
mutemus clipeos Danaumque insignia nobis
aptemus. Dolus an uirtus, quis in hoste requirat? 390
Arma dabunt ipsi.' Sic fatus deinde comantem
Androgei galeam clipeique insigne decorum
induitur laterique Argiuum accommodat ensem.
Hoc Rhipeus, hoc ipse Dymas omnisque iuuentus
laeta facit: spoliis se quisque recentibus armat. 395
Vadimus immixti Danais haud numine nostro
multaque per caecam congressi proelia noctem
conserimus, multos Danaum demittimus Orco.
Diffugiunt alii ad nauis et litora cursu
fida petunt; pars ingentem formidine turpi 400
scandunt rursus equum et nota conduntur in aluo.

Y entonces Corebo, exsultante por el éxito y los ánimos
"Oh amigos, por donde" dice "la primera Fortuna
muestra el camino de la salvación y por donde se muestra favorable, sigamos:
cambiemos los escudos y las insignias de los dánaos a nosotros
adaptemos. Engaño o valor, ¿quién en un enemigo va a exigir? 390
Ellos mismos nos darán sus armas." Habiendo hablado así, luego el emplumado
yelmo de Andrógeo y la hermosa insignia de su escudo
se coloca y acomoda en su lado la espada argiva.
Esto Ripeo, esto el propio Dimante y toda la juventud
alegre hace: cada uno se arma con los recientes despojos. 395
Avanzamos mezclados con los dánaos no con nuestro numen
y, avanzando en medio de la ciega noche, muchos combates
trabamos, a muchos de los dánaos enviamos al Orco.
Unos huyen a sus naves y con su carrera a la costa
segura se dirigen; otros con miedo vergonzoso al ingente 400
caballo trepan de nuevo y se esconden en el conocido vientre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario