Liber I, 157-169

Defessi Aeneadae, quae proxima litora, cursu
contendunt petere, et Libyae uertuntur ad oras.
Est in secessu longo locus: insula portum
efficit obiectu laterum, quibus omnis ab alto 160
frangitur inque sinus scindit sese unda reductos.
Hinc atque hinc uastae rupes geminique minantur
in caelum scopuli, quorum sub uertice late
aequora tuta silent; tum siluis scaena coruscis
desuper horrentique atrum nemus imminet umbra. 165
Fronte sub aduersa scopulis pendentibus antrum,
intus aquae dulces uiuoque sedilia saxo,
nympharum domus: hic fessas non uincula nauis
ulla tenent, unco non alligat ancora morsu.

Los cansados Enéadas se esfuerzan por intentar llegar a la carrera
a las costas que están más cercanas y se dirigen a las riberas de Libia.
Hay un lugar en una profunda bahía: una isla hace un puerto
con la barrera de sus laderas, en las que se rompe todo el agua de alta mar 160
y se escinde en sinuosidades que vuelven hacia atrás.
De aquí y de allí se levantan amenazando hacia el cielo vastas rocas y dos
escollos, desde cuyas cumbres, extensamente,
las aguas guardan silencio tranquilas; luego, desde arriba se cierne una escena
con selvas brillantes y un negro bosque con su terrible sombra. 165
En la fachada de enfrente hay una cueva con rocas colgantes,
dentro aguas dulces y asientos en la roca viva,
casa de las ninfas: aquí no detienen a las cansadas naves amarras
algunas, no las sujeta el ancla con su corvo diente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario