Liber III, 294-305

Hic incredibilis rerum fama occupat auris,
Priamiden Helenum Graias regnare per urbis 295
coniugio Aeacidae Pyrrhi sceptrisque potitum,
et patrio Andromachen iterum cessisse marito.
Obstipui, miroque incensum pectus amore
compellare uirum et casus cognoscere tantos.
Progredior portu classis et litora linquens, 300
sollemnis cum forte dapes et tristia dona
ante urbem in luco falsi Simoentis ad undam
libabat cineri Andromache Manisque uocabat
Hectoreum ad tumulum, uiridi quem caespite inanem
et geminas, causam lacrimis, sacrauerat aras. 305


Entonces,  el rumor de unos hechos ocupa nuestros oídos que no lo podían creer,
que Héleno, hijo de Príamo, reinaba sobre ciudades griegas, 295
habiéndose adueñado de la cónyuge
del eácida Pirro y de su cetro,
y que Andrómaca había pasado de nuevo a un marido de la patria.
Quedé estupefacto, mi pecho se encendió
por un sorprendente deseo
de llamar a ese hombre y conocer tan grandes
aventuras.
Me alejo del puerto dejando naves y playas, 300
cuando, por casualidad, sacrificios solemnes y tristes ofrendas
ante la ciudad en un bosque junto a las aguas de un falso Simunte,
estaba Andrómaca libando a la ceniza y a sus Manes llamaba
junto al túmulo de Héctor, que, con verde césped, vacío
había consagrado y dos altares, causa para las lágrimas. 305


No hay comentarios:

Publicar un comentario